Se tenía que decir y lo dije.
En un mundo tan complejo como el marketing y la publicidad, la experiencia y el conocimiento no son opcionales.
Después de más de 20 años en el ámbito digital, respaldados por mi licenciatura en marketing, especializaciones en diseño, video y desarrollo web, una maestría en administración de empresas y numerosos cursos en redes sociales y software, he aprendido que un verdadero especialista combina pasión, estudio y experiencia. Esas tres cualidades son las que nos permiten seguir innovando, creciendo y, sobre todo, entregando resultados reales.
En los últimos años, hemos visto cómo personas con un curso de tres meses o menos se autoproclaman “expertos”. Esto no solo afecta a los empresarios que confían en ellos, sino que perjudica al sector entero. La falta de ética profesional, las estrategias sin fundamento y el desconocimiento de conceptos clave como segmentación, comportamiento social, estrategia de contenido, diseño corporativo y optimización diaria han inundado el mercado.
Además, se está perdiendo lo esencial: el compromiso, la puntualidad y la honestidad. ¿Cómo confiar en alguien que evade responsabilidades con excusas inverosímiles como: “Ese no es mi departamento” o “La información se perdió en el incendio en California que destruyó los servidores”? Con justificaciones como estas, no solo destruyen la confianza de los empresarios, sino que comprometen los resultados y la reputación del sector.
Es cierto que vivimos en un mundo de evolución constante, pero la evolución no puede basarse en mentiras o atajos. No se trata de hacer algo rápido y sin pensar en el futuro; se trata de construir relaciones y estrategias a largo plazo.
También debemos señalar el abuso de algunos empresarios que subestiman el valor de una buena estrategia de marketing y denigran el trabajo creativo. En nuestra industria, vendemos ideas, estrategias y servicios intangibles, pero detrás de cada uno hay un inmenso valor que debe ser reconocido y respetado.
Trabajemos con ética, con pasión y con la mentalidad de construir relaciones duraderas. Compartamos conocimiento y apostemos por la honestidad como base para crecer juntos. Según un estudio de Harvard, la comunicación honesta y la colaboración basada en información real generan los mejores resultados para todas las partes.
Recuerda: la calidad y el compromiso siempre hablarán por sí mismos. Si eres empresario, apuesta por verdaderos especialistas. Si eres entusiasta del marketing, sigue aprendiendo, pero entiende que la experiencia y el conocimiento profundo son esenciales para alcanzar el verdadero éxito.
La clave está en una premisa sencilla:
“Zapatero, a tus zapatos.”
Daniel Pages
daniel@i3pub.com